No cabe ninguna duda, a tenor de vuestros comentarios, el cambio es inevitable, porque la sociedad cambia y como no podía ser de otra manera arrastra a la educación. Bien sea por moda, estar a la última para conseguir alumnado, bien sea por actualizar el proceso de aprendizaje de los alumnos, todos los centros se terminarán apuntando a las TIC en sus centros.
No obstante, son reseñables algunas ideas muy importantes:
Juan José Picazo González, Aránzazu Cifuentes, Yolanda García Martín y Raúl Palacios afirman que el cambio es necesario, pero ordenado y planificado, no "soltando" indiscriminadamente la tecnología sin el apoyo pedagógico necesario y sin el convencimiento del profesorado del cambio necesario. Este cambio, plantean, no es fácil, existe profesorado reticente al mismo sujeto al papel y los métodos que utilizó en su aprendizaje, y necesita nuevas ideas y tiempo como menciona con precisión Javier Bellido.
Leizet Rodriguez y Marcos Díez se detienen en la importancia del cambio pedagógico, en la necesidad de sustituir el concepto TIC por el TAC donde son los métodos constructivistas, las webquest autoevaluadas o el elearning, los que deben avanzar y Juan Antonio Cristóbal González hace referencia a la necesidad de cambiar la evaluación, o ¿Quizá eliminarla?
En este sentido parece claro que el sistema educativo actual está "lastrado" por unos procedimientos de evaluación obsoletos y que solamente buscan la garantía de la posible justificación en vez de buscar el aprendizaje sobre el error.
Manuel Montilla Díaz utiliza un ejemplo muy gráfico para describir lo que pueden ser los centros del futuro en relación a las TIC si no se tiene precaución, creándose vagones de cola con el rótulo de "brecha digital" con los centros que no sepan adaptarse a los nuevos planteamientos. Algo en lo que casi todos estáis de acuerdo es que se debe tener cuidado con la reforma, pues si es cuestión de moda o de interés "comercial" se corre el riesgo de sufrir lo que ahora sucede con los centros bilingües.
Finalmente y una vez más, Mercedes Lascorz, como hace habitualmente, nos anima a seguir animando, orientando e insistiendo lo que haga falta para que la escuela siga viva y adelante.
Gracias por las precisas conclusiones, muy explícitas para analizar que las TICs no son una cuestión de moda sino una necesidad cotidiana. Si bien la brecha digital existe y no depende solo de la voluntad de ciudadanos ni en la escuela de los directivos, pero lo cierto es que los niños/as que estamos educando en nuestras aulas van a vivir y trabajar en una sociedad informatizada y necesariamente tenemos que prepararlos para ello.
ResponderEliminarAgradezco por la oportunidad que nos dan para poder estar al tanto de los adelantos de la tecnología. Si el mundo avcanza vertiginosamente con una nueva tecnología, pues debemos de hacer uso de esa tecnología para enseñar a nuestros estudiantes y aprovechar lo mínimo y al máximo los favores de la tecnología, es un imperativo que debemos estar no a la moda sino al tanto, que a veces se no hace difícil especialmente a los que tenemos una larga trayectoria en el trabajo educativo, pero debemos seguir adelante
ResponderEliminarNo son una cuestión de moda sino una necesidad de crecimiento acompasado y constante. El darse cuenta y aprender a ser crítico es primordial en ésto, para ello es necesario discernir qué es lo que nos sirve para cumplir con determinado objetivo y qué no nos será tan beneficioso. Esto es parte del crecimiento que debe estar presente en el correr de toooda la vida. Ya nada es para siempre, la educación permanente es una necesidad y el hacer que nuestros niños y nuestras niñas lo hagan suyo es nuestra labor.
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